El ritmo de actualización de Facebook Messenger comienza a ser vertiginoso. Prácticamente a diario incorpora la app de mensajería nuevas funciones. La última: las llamadas grupales, ahora admitidas en Facebook Messenger y en las que podrán participar hasta un total de 50 personas.
Tras los bots, la nueva interfaz o la compatibilidad con los servicios en la nube, Messenger sigue mejorando. Ya está cerca de situarse como la mejor aplicación de mensajería instantánea, si es que no lo ha hecho ya. Ayuda y mucho su integración con Facebook, la red social más usada en todo el mundo.
Las llamadas grupales llegan con la última actualización, y fueron desveladas antes de tiempo en un post de Facebook por David A. Marcus, director de la división de mensajería de la compañía. No pudo aguantar la emoción y se fue de la lengua. Aunque sin duda era algo planificado.
Aún no están disponibles para todos los usuarios de la app en Android e iOS, pero según el comunicado, lo estarán a lo largo de las próximas 24 horas. Puedes revisar la pestaña de aplicaciones en Google Play o en la App Store para ver si tienes lista para descargar la última versión de Messenger.
Las llamadas grupales se tratan de llamadas de voz, no de videollamadas. Esa opción está disponible sólo para llamadas individuales, al menos de momento. Es posible que también evolucione en el futuro, sobre todo viendo la estrategia que sigue Facebook, cuyo objetivo es sustituir a todas las demás apps y servicios poco a poco.
Si Mark Zuckerberg consigue su meta, prácticamente viviremos en el ecosistema Facebook. Veremos vídeos en su web, compartiremos nuestras fotos a través de Instagram y llamaremos y nos escribiremos a través de Messenger y Whatsapp. Incluso se podrá consumir información sin salir de la red social gracias a los Instant Articles.
El anuncio se produce apenas dos días después de que se filtrase la futura incorporación de videollamadas de Whatsapp. Los programadores de Facebook Inc. deben estar verdaderamente saturados de trabajo.
Facebook amenaza con convertirse en un pulpo que extiende sus tentáculos a todos los servicios de Internet. En cualquier caso, si lo hace bien, a los usuarios les importará poco. De ahí el éxito de casi todas sus iniciativas.