Examinará si la memoria, atención y otras herramientas de razonamiento se ven afectadas por la radiación de los terminales.
Investigadores británicos han puesto en marcha el estudio más amplio del mundo para conocer los efectos del teléfono móvil en el cerebro de los niños. La investigación, dotada con un millón de libras, examinará si la memoria, atención y otras herramientas de razonamiento se ven afectadas por la radiación de los terminales.
Las conclusiones del estudio, en el que participarán 2.500 niños de 11 y 12 años, será una guía para los padres sobre los niveles seguros de uso. En Reino Unido, un 70% de los chavales de 11 y 12 años tienen móvil, porcentaje que asciende al 90% en el caso de los de 14 años.
Un estudio de principios de este mes sugería que quienes hablan por el móvil durante más de 15 horas al mes -o media hora al día- tienen tres veces más posibilidades de desarrollar cáncer de cerebro, informa el Daily Mail. Se cree que los niños podrían ser más vulnerables a cualquier daño porque su sistema nervioso se está desarrollando y sus cráneos son más delgados.
Paul Elliott, profesor de salud y medio ambiente en el Imperial College London y líder del estudio, asegura que los lóbulos frontales (encargados del razonamiento y la memoria) y temporales (interviene en la palabra) están cerca de dónde se utiliza el móvil.
El equipo de investigadores afirma que la exposición a las ondas es más baja con los teléfonos más modernos y varía según el modelo.
En cualquier caso, la evidencia disponible hasta la fecha es tranquilizadora, ya que no muestra asociación entre la exposición a las ondas de radiofrecuencia de los teléfonos móviles y el cáncer cerebral en adultos en el corto plazo. Sin embargo, «la evidencia disponible sobre el uso intensivo a largo plazo y el uso de los niños es limitada y menos clara. Es nueva tecnología y está muy extendida. Lo responsable es investigar qué efecto está teniendo», ha advertido Elliott.
Fuente: ABC News.